JERRY CANTRELL
"DEGRADATION TRIP 1 & 2"
RoadRunner
2002
Pfff...que añoranza me da reseñar este álbum, es la época de un tiempo pasado, un tiempo el cual empezé a experimentar cosas que hasta el momento no sabían ni que existían y lo mejor de todo es que las compartía con otra persona, una persona que tampoco existe en mi vida ya, pero siempre estará en algún sitio en mi mente como toda esa música que me ha marcado para siempre. Supongo que este álbum me sirve como símil perfecto para expersar todo aquello y porque ya nada puede repetirse y porque se hace tan difícil olvidar lo inolvidable.Hasta Abril de 2002, surgió la esperanza eterna para los fans de Alice in Chains de una posible reunión para un nuevo disco de estudio, en realidad nunca se había perdido tal esperanza porque oficialmente nunca llegaron a cerrar las puertas del futuro a pesar de que las pruebas circunstanciales dictaminasen lo contrario, el alejamiento de todos los miembros, proyectos en solitario y la ausencia del mundo de la música de Layne no presagiaban nada bueno. Pero cuando Layne Staley fue encontrado muerto de una sobredosis de Heroína y Cocaína en su casa de Seattle en la primavera del 2002, las perspectivas para la continuación del legado de Alice In Chains se esfumaron para siempre, junto con el alma atormentada del cantante.
Para
un grupo cuya producción discográfica fue en gran medida incompatible por las vidas torturadas de sus miembros,
la influencia perdurable que ha arrojado sobre el metal contemporáneo y
el Hard Rock sigue siendo sorprendentemente atronador. El excepcional "Dirt" fue la obra maestra de 1992 y fue la crónica a un descenso grave a la adicción de las drogas y al infierno psicológico de una
banda en el cenit de sus composiciones, curiosamente fueron esas composiciones tan marcadas con las drogas y las depresiones las predominantes a una carrera intachable musicalmente, pero que contrastaban momentos brillantes con momentos interrumpidos de continuidad. En
cualquier caso, es difícil encontrar una banda de metal (o de
otro tipo) desde mediados de los años 90 que no tengan una deuda eterna hacia AIC, las guitarras desafinadas y las dobles armonías vocales de Alice in Chains ya quedan parte de la historia.
El guitarrista Jerry Cantrell fue el importante arquitecto de ese estilo reconocible y perpetuamente imitado, tal vez más que la imagen trágica de Staley aunque la gente no se da cuenta. Como compositor predominante y co-vocalista, Cantrell sacó una enorme porción del peso del AIC, mientras él que nunca exigió ser parte del centro de atención de la banda. Aunque lanzó Boggy Depot ante la aclamación en 1998, también fue como la desesparición de todos los seguidores de Alice in Chains, ya que se convertían esos rumores que siempre habían surgido desde hacia años en algo cada vez más inevitable, sin embargo, la última aventura de Cantrell en solitario "Degradation Trip" ofreció pruebas de lo contrario. Originalmente fue publicado por Roadrunner como un solo disco en junio de 2002, en cambio el proyecto volvió a resurgir pocos meses después con una edición limitada en doble disco, cumpliendo la promesa que la discográfica emitiendo finalmente la obra en forma inédita.
Eso no quiere decir que algunas de las canciones no podrían haberse usado como aportación. A lo largo del álbum, Cantrell muestra una habilidad para combinar la energía oscura de su anterior banda con un poco mas de "comercialidad" en canciones para la radio como "Angel Eyes" o las baladas con sabor a country que terminan cada una de los discos "Gone", "31/32". Temas que de buen seguro podrían ser hits exitosos en casi cualquier grupo de "rock moderno" actual. En su mayor parte, sin embargo, Cantrell sondea el cromatismo de inspiración de Black Sabbath en gran parte del álbum, canciones construidas con una mezcla consistente de cantos que parecen fúnebres y rockeros, ayudado en gran capacidad mediante el apoyo estelar del ex-Faith No More (y actual Ozzy Osbourne) baterista Mike Bordin y el miembro más nuevo de Metallica, el bajista Robert Trujillo (también miembro de los conjuntos recientes de Ozzy). Es evidente decir que seguimos teniendo canciones con regusto a Alice como "Castaway", "Spiderbite", "Anger Rising" y otras tantas.
También vale la pena señalar que, aunque Degradation Trip fue compuesto y grabado mucho antes de la muerte de Layne Staley, su fantasma sondea el fondo de los dos discos. Más de la mitad de las canciones son cartas abiertas o súplicas veladas a personajes que encarnan el rostro atribulado del fallecido cantante de Alice In Chains, lo que hace ser toda una experiencia auditiva que es casi tan terrible como diatribas del Dirt. Cantrell ha declarado en numerosas entrevistas que una gran parte del exorcismo fué el proceso de composición de las letras, él fue capaz de capturar las dolorosas profundidades de la adicción de Staley, describiendo profundamente las experiencias que convivió de primera mano, identificando las turbulencias interpersonales que resultaron las relaciones con la amistad tan asombrosa que les unían. Me quedo con la frase que dijo una vez intentando explicar si estaba saliendo de esa época oscura de Alice In Chains cuando empezó su proyecto en solitario, contestando que "Toda mi vida ha sido un periodo oscuro".
No me gusta escuchar ni hablar de los nuevos AIC porque para mi siempre sera la banda con Layne, aun así si hubieran decidido como nuevo solista a Cantrell en vez de a DuVall me hubiera parecido una opción mas sensata (como siempre es mi opinión personal), él es tan bueno en lo que hace que todo lo demás se vuelve irrelevante. Además, teniendo en cuenta las legiones de imitadores que han estorbado el paisaje de la cultura grunge desde hace tantos años, el hecho es que lo real todavía resuena con máxima autenticidad dando fe de la riqueza de talento y determinación.
Puntuación *8/10
Sergio Verdiell
El guitarrista Jerry Cantrell fue el importante arquitecto de ese estilo reconocible y perpetuamente imitado, tal vez más que la imagen trágica de Staley aunque la gente no se da cuenta. Como compositor predominante y co-vocalista, Cantrell sacó una enorme porción del peso del AIC, mientras él que nunca exigió ser parte del centro de atención de la banda. Aunque lanzó Boggy Depot ante la aclamación en 1998, también fue como la desesparición de todos los seguidores de Alice in Chains, ya que se convertían esos rumores que siempre habían surgido desde hacia años en algo cada vez más inevitable, sin embargo, la última aventura de Cantrell en solitario "Degradation Trip" ofreció pruebas de lo contrario. Originalmente fue publicado por Roadrunner como un solo disco en junio de 2002, en cambio el proyecto volvió a resurgir pocos meses después con una edición limitada en doble disco, cumpliendo la promesa que la discográfica emitiendo finalmente la obra en forma inédita.
Eso no quiere decir que algunas de las canciones no podrían haberse usado como aportación. A lo largo del álbum, Cantrell muestra una habilidad para combinar la energía oscura de su anterior banda con un poco mas de "comercialidad" en canciones para la radio como "Angel Eyes" o las baladas con sabor a country que terminan cada una de los discos "Gone", "31/32". Temas que de buen seguro podrían ser hits exitosos en casi cualquier grupo de "rock moderno" actual. En su mayor parte, sin embargo, Cantrell sondea el cromatismo de inspiración de Black Sabbath en gran parte del álbum, canciones construidas con una mezcla consistente de cantos que parecen fúnebres y rockeros, ayudado en gran capacidad mediante el apoyo estelar del ex-Faith No More (y actual Ozzy Osbourne) baterista Mike Bordin y el miembro más nuevo de Metallica, el bajista Robert Trujillo (también miembro de los conjuntos recientes de Ozzy). Es evidente decir que seguimos teniendo canciones con regusto a Alice como "Castaway", "Spiderbite", "Anger Rising" y otras tantas.
También vale la pena señalar que, aunque Degradation Trip fue compuesto y grabado mucho antes de la muerte de Layne Staley, su fantasma sondea el fondo de los dos discos. Más de la mitad de las canciones son cartas abiertas o súplicas veladas a personajes que encarnan el rostro atribulado del fallecido cantante de Alice In Chains, lo que hace ser toda una experiencia auditiva que es casi tan terrible como diatribas del Dirt. Cantrell ha declarado en numerosas entrevistas que una gran parte del exorcismo fué el proceso de composición de las letras, él fue capaz de capturar las dolorosas profundidades de la adicción de Staley, describiendo profundamente las experiencias que convivió de primera mano, identificando las turbulencias interpersonales que resultaron las relaciones con la amistad tan asombrosa que les unían. Me quedo con la frase que dijo una vez intentando explicar si estaba saliendo de esa época oscura de Alice In Chains cuando empezó su proyecto en solitario, contestando que "Toda mi vida ha sido un periodo oscuro".
No me gusta escuchar ni hablar de los nuevos AIC porque para mi siempre sera la banda con Layne, aun así si hubieran decidido como nuevo solista a Cantrell en vez de a DuVall me hubiera parecido una opción mas sensata (como siempre es mi opinión personal), él es tan bueno en lo que hace que todo lo demás se vuelve irrelevante. Además, teniendo en cuenta las legiones de imitadores que han estorbado el paisaje de la cultura grunge desde hace tantos años, el hecho es que lo real todavía resuena con máxima autenticidad dando fe de la riqueza de talento y determinación.
Puntuación *8/10
Sergio Verdiell
