M83
"HURRY UP, WE'RE DREAMING"
Naïve/Mute
2011
Quizás soy un ingenuo, perdón, quizás no, ciertamente lo soy, y por eso nunca he sido de tener alardes de nada porque conozco mis limitaciones en cualquier campo, soy el primero que todavía aprende sobre la mayoría de cosas, soy como vulgarmente se dice aprendiz de todo y maestro de nada, pero llevo días intentando resolver un enigma y no soy capaz de dar con él, y es el de ¿en qué parámetros se mide la grandeza de un mito?. De verdad, que alguien me lo explique por favor, porque yo soy incapaz de saberlo. ¿Por sus obras? ¿Por el poco o mucho tiempo que estuvo ofreciendo su talento? o ¿Por lo que trasmitía?. Ahí lo dejo, hagan sus reflexiones y si dan con ello no duden en ponerse en contacto conmigo.
¿Te has preguntado alguna vez hacia a donde van las ondas sonoras musicales una vez son creadas y se propagan por todo el aire hasta salir por el espacio? Estoy convencido que sortean obstáculos cómicos, entre agujeros negros, lluvias tóxicas y agitadas estrellas apunto de implosionar, haciendo de todo estos elementos un fondo de música de acompañamiento perfecto para incursiones de meteoritos y galaxias iluminadas por espirales de luz. Polvo interestelar aglomerado en nuevos mundos en una infinita cadena de estrellas, es imposible incluso para la imaginación, imaginar la completa grandilocuencia del universo.
Muchos álbumes actuales parecen ser el resultado de diferentes tipos de drogas. si tuviera que clasificar este con un medicamento, sin duda sería el ácido. El resultado es emocionante, al menos en este caso. Cuando se trata de un álbum doble, el riesgo es mayor y es sinónimo de valentía, pero aquí no es ningún problema, nos encontramos con un álbum maduro, perfectamente producido, épico, sinfónico, nostálgico y en ocasiones memorables. M83 son claros y siempre han construido la sinfonía perfecta. Anthony Gonzalez, es la mente y el creador del proyecto, redescubre, reinventa y amplifica el sonido de este trabajo hacia los picos trascendentes del espacio. La atmósfera es tan aguada y circular que suena como un sonajero electrónico que mejora los viajes interplanetarios. Como de costumbre, M83 nos ofrece baladas furiosas, y un shoegaze electrónico, nostalgia desgarradora y dulce como un caramelo, cuya receta se perdió en los finales años 80. La novedad de este álbum, además de su longitud (doble album), son los breves estallidos de oscuridad y sombras en el ambiente, y en que Anthony ya no se oculta a cantar sus propias canciones. La primera de ellas, es llamada de una manera sutil "Intro", siempre me ha gustado los titulos que ofrecen lo que prometen, y es un dueto con Zola Jesus. Es un acierto hacia la elevación emocional del disco. Cada pieza tiene su forma individual, sin excepción, es una oda a la melancolía, una catarsis de sentimientos sin inhibiciones. Es evidente que el compositor deja llevar por su inspiración desenfrenada, dijo que nada ni nadie dictarían su elección. Por supuesto, las buenas ideas campan a sus anchas en este doble álbum. Por otra parte, a pesar de sus 22 canciones, Hurry Up, We're Dreaming es un álbum que sin duda es la forma más fácil de acceder al amigo González. Pero debemos admitir que muchas piezas son bastante "parecidas". Y a pesar de su calidad, no merece mas de tres o cuatro variaciones a lo larcho y ancho del disco. Incluyendo el gran single "Midnight City". Anthony González anunció un álbum "muy muy muy épico." Sí, pero la épica navega entre la valentía y el dolor. Pero Hurry Up, We're Dreaming no es un viaje en bruto, tenemos delante unos momentos de pura belleza que marcan. El encanto retro de "Wait", funciona suavemente como una de las más conmovedoras canciones en la carrera de los de Antibes. "Outro" está adornada con la misma sencillez y vuelven a ofrecer un título único y sensible.
En resumen, este viaje tiene todo y se propaga a través del tiempo y el espacio. Gonzalez demuestra una vez más su habilidad para guiar naves espaciales y unirnos en las profundidades del cosmos más oscuros, saca de sí mismo tormentas de meteoritos y momentos de admiración. Lo que queda al final son las visiones, las emociones y los mareos, y si ésto no fuera suficiente para embellecer tus noches, solo debes despertar y creer si realmente tan solo a sido un sueño. Disfrútalo y regocijate en él, no te dejes intimidar por su tamaño.
Sergio Verdiell
Puntuación *7,5/10